Inicio mi carrera de Medicina Humana en la Universidad de
San Martin de Porres con entusiasmo y con el ánimo y la ilusión de convertirme
en la profesional que mi padre Waldo siempre anhelo, sueño que fue forjándose a
lo largo de los años con su ejemplo de vida, con su pasión por la medicina,
admirable vocación y férrea mística de servicio. Lo recuerdo con su chaqueta
blanca, impecable en el vestir y minucioso en la atención al paciente. Su
ejemplo y huella imborrable será mi inspiración, mi guía y el motivo para
lograr mi superación personal y profesional. Este blog servirá para compartir
con otros estudiantes de Medina Humana experiencias, conocimientos y lecturas
que nos ayudarán a reforzar la parte académica. Pero también será una ventana
para narrar anécdotas, vivencias personales y situaciones rutinarias, que valdrán
la pena compartir. Sé que hay un largo camino por recorrer, que habrán
amanecidas con extensas noches sin dormir, dificultosos trabajos, notas que me causarán
frustraciones y maestros con los que tal vez no comparta sus mismas ideas. Sin
embargo, sé que todo valdrá la pena, y que algún día me pondré la chaqueta de médico
para orgullo de mi padre que me guía desde el cielo, de mi madre Isabel que no
escatima ningún esfuerzo por mí; y de mis hermanos menores Waldo y Claudio.
Agradezco a Dios por
darme la oportunidad de estudiar la carrera que quiero y prometo esforzarme al máximo porque la exigencia académica así lo
requiere en este mundo globalizado, competitivo y que demanda de grandes
talentos.